El mundo de las artes marciales
Las artes marciales, son el hogar de una gran cantidad de mitos, conceptos erróneos, verdades a medias y mentiras. Aun así, todo esto es perjudicial, no solo para aquellos que son engañados, sino para la comunidad de artes marciales en su conjunto.
Mito 1 – Conocimiento ancestral súper secreto de lo asombroso
Las únicas artes que vale la pena conocer son los estilos antiguos y secretos enseñados por monjes escondidos en montañas fantásticas que nunca enseñan sus misterios a los forasteros. Cuanto más antiguo y puro sea un arte marcial, mejor. Cuantas menos personas lo hayan estudiado, mejor. Cuanto menos conocido sea, mejor. Y todas las artes marciales modernas son simplemente versiones “diluidas” de estos antiguos secretos.
Verdad: La verdad es que el combate siempre está evolucionando. Las artes marciales más antiguas y comenzaron cuando un hombre de las cavernas tomó un palo y golpeó a otro en la cabeza con él. Probablemente, comenzó incluso antes de que él se diera cuenta de cómo usar el palo. Si volviéramos al sistema “más antiguo”, sería así de simple.
Sin embargo, algunas de estas artes antiguas pueden ser muy divertidas que las aprendas y te pueden ser útiles en la era moderna. No hay nada de malo en que las estudies. Simplemente, no esperes que sean asombrosamente superiores a otras artes.
Mito 2: El entrenamiento de fuerza te hará más lento
Seguramente escuchaste numerosas veces este mito numerosas de artistas de esta disciplina. El argumento es algo como esto: “No hago entrenamiento con pesas porque el entrenamiento con pesas te hace grande y voluminoso y eso te hace lento”. Y la verdad es:
Que seas grande o no, no te hace lento. Estar gordo te hace lento. Más músculo te hace más rápido y más fuerte. Y recibirás mejor un golpe. En resumen, para el artista marcial NO hay inconvenientes en el entrenamiento de fuerza. Mejorará tus artes marciales en todos los sentidos.
Casi cualquier programa de entrenamiento de fuerza básico te beneficiará, incluso si no es perfecto. No dejes que lo perfecto sea enemigo de lo bueno. Empieza a incorporar pesas libres en tu régimen de entrenamiento hoy.
Mito 3 – Las peleas solo terminan cuando un combatiente mata horriblemente al otro
Esto es más comúnmente difundido por un artista marcial que está obsesionado con mostrar lo “mortal”. Todas las técnicas que entrena son letales o mutiladoras, y “nada más funciona en la calle”. Todo lo que no sea muy destructivo para el oponente es “inútil” y “no vale la pena que lo aprendas”. Te harán creer que la única forma de terminar una pelea es mutilar brutalmente a tu oponente.
Verdad: La lucha termina cuando un combatiente u otro ya no tiene la voluntad de luchar. Matar a tu oponente definitivamente no logrará este objetivo. Es mejor opción lograr esto, con menos destrucción que matar o mutilar.
La mayoría de las situaciones de autodefensa no son peleas a muerte. Es mucho más probable que te encuentres en un bar, ya sea tratando de controlar a un amigo pasado de copas que se ha alterado un poco, porque ha bebido demasiado y quiere empezar alguna pelea, pero es muy poco probable que sea una pelea a muerte.
Ten cuenta…
Que algunos estilos de estas artes específicamente tardan más en alcanzar un nivel de efectividad en el mundo real. El Aikido, por ejemplo, se centra en un enfoque más “pasivo” y menos destructivo de la autodefensa. Puede ser muy eficaz, si tienes alrededor de una década para ponerlo en práctica. Sin embargo, si no estás complementando el programa con otras cosas (y muchas escuelas de Aikido lo hacen, para su crédito), llevará mucho más de un año para que alcances algún nivel de efectividad. No obstante en la mayoría de las escuelas, 9-15 meses te llevarán a un lugar útil.