El entrenamiento autógeno (AT) es una técnica que le enseña a su cuerpo a responder a sus órdenes verbales. Estos comandos “le dicen” a su cuerpo que se relaje y ayudan a controlar la respiración, la presión arterial, los latidos del corazón y la temperatura corporal.
El objetivo de la TA es lograr una relajación profunda y reducir el estrés. Una vez que haya aprendido la técnica, puede usarla siempre que necesite o desee aliviar los síntomas del estrés, o puede practicarla con regularidad para disfrutar de los beneficios de la relajación profunda y prevenir los efectos del estrés crónico.
El entrenamiento autógeno
Consta de seis ejercicios estándar que hacen que el cuerpo se sienta cálido, pesado y relajado. Para cada ejercicio, adoptas una postura simple (sentado en una silla cómoda o reclinada), te concentras sin ningún objetivo y luego usas la imaginación visual y las señales verbales para relajar tu cuerpo de alguna manera específica.
Aprende cada ejercicio leyendo sobre él o mirando a un maestro, y luego practicándolo durante unos minutos varias veces al día. Aprender los ejercicios, ya sea con un instructor o por su cuenta, generalmente se mueve a un ritmo lento y constante, y toma de 4 a 6 meses dominar los seis ejercicios.
Sin una práctica regular, es poco probable que el entrenamiento autógeno tenga efecto. Por esta razón, solo aquellas personas que están motivadas y comprometidas con aprenderlo probablemente obtendrán algún beneficio de la AT. Pero para aquellos que dominan la técnica, funciona y puede ser un tratamiento eficaz para el estrés crónico.
La forma en que funciona la AT
No se comprende completamente, pero sus efectos en el cuerpo son mensurables. Los expertos creen que la AT funciona de manera similar a la hipnosis y la biorretroalimentación. Los ejercicios permiten la comunicación entre la mente y el cuerpo, lo que le permite influir en las reacciones corporales que normalmente no se pueden controlar, como la presión arterial, los latidos del corazón y la temperatura corporal.
¿Para qué se utiliza el entrenamiento autógeno?
La mayoría de las personas utilizan el entrenamiento autógeno (AT) para aliviar los síntomas del estrés. También puede ser útil para problemas como ansiedad generalizada, fatiga e irritabilidad. Algunas personas lo usan para controlar el dolor, reducir los trastornos del sueño como el insomnio y aumentar su resistencia al estrés.
¿Es seguro el entrenamiento autógeno?
El entrenamiento autógeno (AT) es seguro para la mayoría de las personas. Antes de comenzar un programa para aprender TA, consulte a su médico para un examen físico y analice los efectos fisiológicos que la TA podría tener en usted. Si tiene una enfermedad grave como diabetes o una afección cardíaca, aprenda y use la AT solo bajo la supervisión de su médico.
Algunas personas tienen un fuerte aumento o disminución de la presión arterial cuando hacen ejercicios de AT. Si tiene presión arterial alta o baja, pídale a su médico o enfermera que verifique si la AT está acercando su presión arterial a lo normal.
Si usa AT para ayudar a controlar cualquier enfermedad, incluidos todos los problemas cardíacos y circulatorios, no la use para reemplazar ningún tratamiento convencional, como los medicamentos.
Los ejercicios:
- El ejercicio de reposo: hace que el cuerpo se mantenga en un estado de calma
- El ejercicio de pesadez: se realiza provocando una sensación de pesadez en el cuerpo para luego llegar al estado de relajación
- El ejercicio de calor: consiste en sentir sensación de calor en el cuerpo para luego llevarlo a un estado de relajación
- El ejercicio de respiración: luego de estar en un estado de calma, pesadez, y calor se practica ejercicios de respiración profunda, hasta volver a llegar a un estado de relajación intenso
- El ejercicio abdominal: se piensa que su abdomen es una fuente de calor y su circulación intensifica la relajación
- El ejercicio de la cabeza: consiste en mantener su mente relajada, y concentrada y ayuda a lograr la relajación máxima
AT no se recomienda para:
- Niños menores de 5 años.
- Personas con trastornos mentales o emocionales graves.
- Si se siente muy ansioso o inquieto durante o después de hacer los ejercicios, detenga la AT o continúe solo bajo la supervisión de un instructor de AT profesional.
Hable con su médico sobre cualquier práctica de salud complementaria que le gustaría probar o que ya está usando. Su médico puede ayudarlo a administrar mejor su salud si conoce todas sus prácticas de salud.