Para saber qué no comer lo mejor es tener una dieta para deportistas
Se suele creer en muchos casos que para la alimentación y que una dieta ideal para deportistas es aquella que es equilibrada y que contiene grandes porciones de proteínas; sin embargo, en algunos casos esto no es del todo cierto, al menos cuando se quiere tener un entrenamiento equilibrado ya que entre el 50 y el 60% de la energía que necesitamos mientras que hacemos deporte debe provenir de alimentos principalmente ricos en carbohidratos (pan, pasta, arroz, cereales, patatas, frutas…), que después de la comida se transforman en glucosa.
Es recomendable en la mayoría de los casos para el entrenamiento, ingerir las raciones de energía que estén aconsejadas y variar las raciones de carbohidratos siempre que sea de acuerdo con el apetito de cada persona concreta y siempre que un profesional no diga lo contrario. Se aconseja llevar como norma general un control semanal del peso que tenemos en cada momento concreto para conocer las necesidades que cada uno podemos que tener energéticas.
La dieta para el entrenamiento debe ser ALTA en:
Carbohidratos llamados Complejos: el 50-60% de las necesidades hemos visto de energía, deben provenir de alimentos que sean ricos en carbohidratos, ya son los que necesitaremos porque transforman posteriormente en glucosa, que es la base y fuente de energía preferida para que den el mejor resultado y trabajen los músculos. Si nos dedicamos a nivel competitivo, se pueden ingerir raciones extra unos días antes de la competición o de la práctica del ejercicio de competición, para saturar el hígado de esta forma y los músculos de glucógeno. Aunque esto siempre tenemos que verificarlo con un experto para que valore nuestro caso concreto.
Líquidos: En todo momento debe mantenerse el cuerpo bien hidratado de forma correcta durante y después de los entrenamientos que llevemos a cabo. Tanto si lo hacemos en casa como si hay competiciones. Hay que controlar de forma rigurosa el consumo de bebidas como el café que contengan cafeína.
La dieta equilibrada para el entrenamiento debe ser BAJA en:
Grasas: deben evitarse en la medida de lo posible, alimentos con alto nivel de grasa. El consumo, en concreto de una pequeña cantidad de grasa todos lo necesitamos y es necesario para una buena salud, pero siempre con moderación. Ya que la grasa ayuda especialmente para la absorción adecuada de las vitaminas liposolubles.
La grasa, a diferencia de lo que algunas personas opinan, no es una buena o recomendable fuente de energía para el entrenamiento, por lo que es conveniente siempre que se pueda consumir alimentos que contengan y que sean con bajo contenido de grasas en su mayoría y evitar el uso de grasa adicional a la hora de cocinas como la mantequilla, margarina, mayonesa…
La dieta se recomienda que sea MODERADA en:
Proteínas: los atletas de primer nivel para el entrenamiento de la resistencia necesitan incrementar de forma amplia sus raciones de proteínas para el rendimiento y para asegurar una adecuada en todo momento, recuperación de los músculos después de la actividad deportiva.
Para esto, no es necesario incrementar de forma amplia el consumo de proteínas como podemos encontrar con suplementos proteínicos, sólo nos basta con consumir más alimentos con proteínas en cada caso. Se recomienda para esta, una ingesta diaria (siempre dependiendo de cada caso concreto) de una ración de proteína diaria por cada 5-8 Kilogramos de nuestro peso corporal, donde lo que entendemos por una ración equivale generalmente a 30 gramos de carne roja, pollo sin la piel o pescado, 250 mililitros leche descremada y un huevo entero.
La Fibra:
En cuanto a la fibra, los atletas de resistencia que se entrenan de forma habitual generalmente necesitan ingerir más cantidad de alimento, por lo que no es conveniente por diferentes motivos, el consumo de alimentos que contengan un alto contenido de fibra en las dietas que se llevan a cabo.
Recomendaciones generales
Las recomendaciones o consejos de este post son meramente informativos. Si estás pensando en iniciar una dieta para tu entrenamiento, siempre es necesario contar con el consejo y las pautas de un profesional de la salud.